Si hace unos años, las secadoras eran electrodomésticos que apenas se usaban, en la actualidad están sobrando cada día más popularidad. De hecho cuando muchas personas deciden amueblar su casa ya cuentan entren sus gastos la compra de una secadora. Esto tiene mucho que ver con el ritmo de vida que llevamos y que hace que cada vez tengamos menos tiempo para esperar a que la ropa se seque, lo cual convierte a la secadora en un aparato de gran ayuda.
Pero además, debemos tener en cuenta que hay zonas de nuestro país que tienen un clima más húmedo y por ello la ropa tarda más en secarse. Si a esto le sumamos el hecho de que las casas sean cada vez más pequeñas y muchas veces no hay sitio para tender, entenderás por qué las secadoras se han ido abriendo un hueco en nuestros hogares. No obstante, si estás pensando en comprar una, antes debes saber cuáles son los dos tipos de secadoras que existen.
Secadoras por evacuación
Son las más baratas. Funcionan centrifugando la ropa y generando aire caliente para secarla. Después el aire sale por un tubo que debe estar comunicado con el exterior por lo que deben colocarse en un lugar que permita la instalación del tubo. Existen dos tipos de secadoras de evacuación: mecánica con temporizador o eléctrica con programa determinado. Nosotros te recomendamos la electrónicas, ya que ahorrar energía y son más cómodas y sencillas de manejar.
Secadoras por condensación
Estos electrodomésticos hacen que las humedad de la ropa se evapore y después se condense, recogiéndola más tarde en un depósito. Es ideal si no tenemos la posibilidad de instalar un tubo exterior. Eso sí, suelen ser más caras que las secadoras de evacuación.
Lo cierto es que si contamos con espacio suficiente, la secadora por evacuación es mejor opción pues gasta menos energía y es más barata. La clave está en elegir un modelo de marca conocida y que nos ofrezca garantías. No obstante, si tienes problemas de espacio, siempre puedes decantarte por una lavadora-secadora. El único inconveniente es que resulta más complicado encontrar piezas en caso de avería, por lo que los expertos del servicio técnico recomiendan comprar ambos electrodomésticos por separado.